*instantánea tomada por un colega que nunca optará al Pulitzer.
Hace tiempo que le estoy dando vueltas al tema y sí, creo que se están perdiendo las cosquillas. Vamos que igual es algo que se hacía en épocas pasadas porque no teníamos whatsApp.
Que bueno esa otra: qué hacíamos en los semáforos antes (antes del whatsApp digo, y aclaro para los que tenemos déficit de atención) las personas humanas de bien que nunca hemos hurgado en nuestra nariz (ni en tocha ajena)?
La movida es que últimamente solo tengo pensamientos que se reducen a una idea: cuando yo era joven, la vida era distinta.
Muy strong: cuando yo era joven.
Ojo cuidado que no es que sea mayor (vieja vamos). Lo que pasa es que me he puesto a echar cuentas y ya no me da tiempo a ser una abuela molona. Shit.
Claro porque a ver, si tengo 36 años, 12 meses, 10 días, y casi 2 horas (la edad es algo que me trae sin cuidado, sí), pensando que hoy mismo, justo ahora, sola en casa, fuera capaz de embarazarme (he consultado varias fuentes, y hay empresas que por una módica cantidad de euros te mandan inyecciones de esperma a domicilio listas para inyectar), y contando que mi vástago (será vástaga que ya lo tengo todo pensado), tarde digamos lo mismo que yo en gestar otro mini humano, como pronto podría ser abuela a los 73.
73 es una edad buena para hacer puenting, para volverse a enamorar o para ir a una playa nudista (amén publicista de ING Direct). No para hacerse cargo de un bebé que está programado para importunar.
Pues así lo calculo todo: mal.
Pero bueno, cuando llegas a cierta edad (y dale perico al torno), ya eso es casi lo de menos.
INCISO: para poner en situación, son las 00.55h del lunes (los quisquillosos apostillarían «ya es martes»), y tengo la tv de fondo (ya, perdón, yo también he dicho hasta la saciedad «es que no veo la tele, soy Netflix», pero he mentido como muchos otros).
Al lío: acepto de todas todas que en tve1 no haya publicidad y que den la película del tirón. Pero sería posible, de alguna manera, que entre película y película nos dieran tregua a los que tomamos cola de caballo como si nos importara mucho lo de que «de lo que se come se cría»? GRACIAS.
Sigo.
Me la pela calcular mal.
Pasados los 30, si estás buena y tienes pasta son los 40 (me lo han contado) los números son ETA.
En valores absolutos intentamos esconder peso, edad, sueldo y hasta número de parejas estables (de ligues en mi caso, que siempre he dado con hombres que creían que «compromiso» era una consigna para bajar al restaurante japonés a adquirir algún tipo de sopa). Total, paso de contar. Si no fuera así no tendría un Zara en casa, con sección Kids incluida. Amancio Ortega es mi hipoteca.
Si me importaran algo las cifras, habría puesto ya la reclamación por las 2 horas y media de retraso del vuelo que cogí el lunes pasado. Por cierto, alguien de Air Europa en la sala? por arreglar el tema de forma amistosa digo, ni pa’ti ni pa’mí.
Cambiando de tercio (y dale a los numbers), que se avecina el verano familia. Que el verano es esa época en la que o estamos de vacaciones (a mí me queda nada) o nos da por sacar el funcionario de carrera que llevamos dentro. Vamos que es el tiempo de no hacer nada, aún en el curro. Pero bueno es tontería: trabajo con gente que vive en un eterno estío.
A mí me pasa algo curioso y es que cuando se alargan los días, lo que quiero es dilatar las noches. Sigo con mi lógica aplastante. Las noches de los días más largos son las que más cunden. Bueno o eso me dijo mi terapeuta. Y como me conoce la jodía. Que sabe que me muevo mejor en ambientes en los que la penumbra es la reina.
Sí, tengo terapeuta. Y quiero añadir que esta semana tengo cita para un masaje bioenergético y para una sesión de hipnosis. Se puede ser más friki (o friqui, que también es correcto)?
Pues sí: también me estoy currando la adicción a los Room Escapes.
Yo creo que hasta la fecha es lo más adrenalínico que he probado. Lo siento hombres que habéis pasado por mi vida.
Pues sí, los Room Escapes son un rollo Cluedo en 4D donde puedes sentirte señorita Amapola y te encantaría tener un candelabro para matar a alguien en la cocina.
El Cluedo es el responsable de mi formación como Criminóloga. Tenía que decirlo. Y no, nunca he visto un episodio de CSI, pero preguntadme por la cuerda, el puñal o la pistola (por cierto Juguetes HASBRO, las miniaturas de las armas eran necesarias?).
Total que en un Room Escape, estás dentro de esa movida que nunca te gustaría vivir pero que siempre has tenido curiosidad de tocar de cerca, llámalo crimen, llámalo misterio, llámalo habitación oscura. Y mola mazo, porque nos pasamos la vida del palo «mierda! mierda! no me acuerdo de la canción que tarareabas antes, me das una pista? pero no me la digas eh!» y queriendo adivinar cosas y va y se inventan la movida esa. Por cierto, esa consigna siempre acaba en un «bueno va, dímelo, pero joder, lo tengo en la punta de la lengua, pero va, da igual«.Seguido de un, «mierda es verdad«.
Si es que está todo inventado.
Y bueno, ya acabando, tengo algunos conocidos que al leer Room Escape entienden Ikea, porque también les resulta un enigma tratar de salir vivos de ahí. La pena es que ellos no tienen un máximo de 60 minutos, y para ellos ese es solo el tiempo mínimo.
NOTA AL LECTOR: se informa, se comunica, se avisa, se AMENAZA: la próxima publicación será necesariamente posteada en un lapso de tiempo inferior al actual, pero las condiciones (mayormente mentales mías) no lo han permitido esta vez.
Quiéranse, entre ustedes y hacía el resto.
*boas noites
ERES LA ESQUIZOFRÉNICA CON PEOR PRONOSTICO QUE CONOZCO (ES CIERTO SÓLO TE CONOZCO A TÍ).
SENYORITA AMAPOLA, ESPANYA LA QUIERE!!!
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Con el candelabro por favor!y mátame en la cocina!
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